Generaron biotecnología de bioencapsulación, que contribuye a una mayor sobrevivencia de larvas del pez y crustáceos; esta investigación podría replicarse a otras especies acuícolas de aprovechamiento comercial.
Investigadores encabezados por el Instituto Nacional de Pesca (INAPESCA) desarrollaron biotecnología de bioencapsulación que permite al pescado blanco —especie endémica del Lago de Pátzcuaro, Michoacán— un mejor aprovechamiento de los nutrientes que consume y garantiza su desarrollo y cultivo comercial.
Esta investigación consistió en el empleo de pulgas de agua y rotíferos dulceacuícolas como bioencapsuladores de bacterias con actividad probiótica (que promueven la salud y la digestibilidad y absorción de nutrientes de la comida), para alimentar larvas de pescado blanco. Sigue leyendo